La búsqueda de empleo público entre los más jóvenes está en aumento, lo que ha resultado en un perfil de aspirantes cada vez más juvenil en España, tal como lo demuestra la segunda entrega del informe El peso del opositor en España.
Realizado por OpositaTest, este informe destaca la cantidad de personas que aspiran a un puesto en el sector público, cifra que se mantiene en niveles récord. El atractivo por estas posiciones sigue siendo elevado, impulsado por la reciente expansión de oportunidades en el empleo público durante el 2023 y las expectativas de crecimiento en los años venideros, debido tanto a la necesidad de renovación generacional en la administración pública como a la reciente abolición de ciertas barreras por parte del gobierno hace un mes.
Los datos indican que el entusiasmo por competir por estas plazas también ha permeado profundamente entre los más jóvenes, siendo la mayoría de los interesados en presentarse a oposiciones personas de entre 18 y 34 años.
Perfil del nuevo opositor en España
La mitad de los españoles de entre 18 y 55 años ha participado, participa o planea participar en oposiciones, manteniendo esta tendencia en su punto más alto desde el año pasado, de acuerdo con un estudio. Este análisis también resalta la cantidad de nuevos aspirantes y, en particular, los futuros candidatos. En el último año, el 10% de la población en edad de trabajar ha iniciado el proceso de oposición. Una proporción aún mayor de ciudadanos españoles considera presentarse a estas pruebas. En la actualidad, el 20% de las personas en edad laboral contempla la posibilidad de opositar.
La mayor parte de los interesados son jóvenes, con cerca del 56% (6 de cada 10) de los que piensan presentarse a oposiciones en el futuro cercano siendo menores de 35 años, y la generación Z destaca como el grupo más inclinado hacia estas pruebas. Dentro de este segmento, los individuos de entre 18 y 24 años constituyen más de la mitad.
La mayoría de los aspirantes son mujeres, representando el 70% de aquellos que consideran rendir una oposición. Además, la mayor parte de ellos no está empleada, dedicando su tiempo completo a la preparación de las oposiciones, ya que el 54% afirma no tener trabajo. En cuanto a su formación, el 42% posee estudios universitarios y el 32% ha completado el bachillerato o tiene una educación inferior.
El interés por las oposiciones también varía entre las distintas comunidades autónomas, siendo Murcia, Castilla y León, Castilla-La Mancha, la Comunidad Valenciana y Andalucía las regiones con mayor predisposición hacia estas pruebas. Específicamente, uno de cada cuatro interesados proviene de Andalucía.
El principal atractivo del empleo público: La estabilidad
Las razones para aspirar a un puesto de funcionario son variadas, incluyendo motivos tanto personales como profesionales, y son impulsadas por la situación actual y la notable oferta que la administración pública presenta hoy en día. El aumento de oportunidades en el sector público es visto por muchos como una vía hacia la estabilidad laboral, un anhelo que se convierte en realidad para aquellos que buscan seguridad en su futuro profesional.
El deseo de estabilidad es el factor principal que impulsa a los jóvenes a considerar la posibilidad de opositar, colocándolo por encima del interés en el salario. Esta inclinación está fundamentada en la dificultad para hallar empleo y en la inestabilidad de los puestos de trabajo disponibles tras finalizar sus estudios. Es crucial mencionar que España lidera las cifras de desempleo juvenil en la Unión Europea, alcanzando casi el 30%.
En el momento de elegir entre distintas opciones de empleo, los jóvenes se inclinan mayormente por aquellas oposiciones que ofrecen un mayor número de vacantes, tales como las de áreas administrativas, de salud y educación, aunque es común que se preparen para varias simultáneamente. “El fin último es obtener un puesto, más que el tipo de puesto en sí, ya que una vez dentro, estos jóvenes consideran la posibilidad de ascender o cambiar a puestos más atractivos dentro de la estructura”, explica Jacobo Fariña, encargado de comunicaciones en OpositaTest.
